La tecnología aplicada a la salud, una pequeña parte de los que denominamos eSalud, puede ser (o está siendo) una de las variables significativas para que dos de los grandes sistemas operativos aplicados a la telefonía móvil y que dos de los almacenes de apps más importantes tengan subatalla particular para lograr el mercado.
Es cierto que la salud es un tema que preocupa, y cada vez más, y los ciudadanos nos están demandando productos para mejorarla y mayor información para sus cuidados.
Las empresas «saludables» y sobre todo las del ámbito de la alimentación, ya lo llevan aplicando desde hace años a través de «eliminar sustancias o productos nocivos para la salud»o la creación de líneas «light» o saludables. Del resto se encarga el mercado.
El colesterol es una de las variables de riesgo cardiovascular con un riesgo relativo de menor peso que la diabetes o el tabaquismo por ejemplo. Pero este riesgo cardiovascular es muy bien utilizado por la publicidad de un alimento de forma que ha calado en la población que «valores por encima de 200 pueden poner en riesgo su salud cardiovascular». Es cierto que no se dice ninguna mentira pero el lenguaje no verbal utilizado y el contexto del anuncio hace que muchas personas puedan interpretar que «valores de 201 de colesterol ponen en gran riesgo tu vida». Esta es la magia de la publicidad… y la causa de algún cambio de parecer en la consulta para explicar porqué negociamos con más insistencia el abandono del hábito tabáquico (que supone un esfuerzo personal para el cuidadano) que el tratamiento médico del colesterol (donde el ciudadano va a ser un sujeto pasivo a merced de la química)… porque de la dieta ni hablamos!.
Porque en cuestiones de salud nos gusta, en general y a todos, tener que hacer el mínimo esfuerzo personal para lograr un máximo de salud. Y en ello la tecnología nos puede aportar mucho:
- Dándonos la sensación que por el hecho de «medir» vamos a «controlar».
- La tecnología nos permite medir muchas variables biológicas y cada vez estos sistemas de medida los vamos a tener incorporados en elementos cotidianos que vamos a llevar encima («wearables») o incorporados en nuestros terminales móviles ya sea a través de aplicaciones (apps) o en los propios sistemas operativos.
- La tendencia de confundir «bienestar» y «salud» en una «ampliación de la definición de salud de la OMS… hasta donde convenga a mi producto».
Pero el hecho de «medir» las variables biológicas es algo que llevan haciendo los ciudadanos desde hace tiempo…. y posiblemente por culpa de los propios sanitarios. Deberíamos pensar qué hay en el fondo de esta «necesidad» imperiosa que pueden tener algunos pacientes/familiares por «medir» (falsamente controlar) una variable.
- Posiblemente sus sanitarios, en algún momento evolutivo de su enfermedad, han insistido en la medida, medida, medida de la misma. Medir sin modificar las variables (hábitos de vida o medicación) va a ser someter a la variable a las variaciones biológicas o a los errores de medida del aparato… ¿por qué nos empeñamos muchas veces en medir sin modifcar nada?, ¿esperamos que las cosas cambien de forma espontánea?, ¿acaso esta no es una visión mágica de la salud?.
- A veces esta medida está relacionada con transgresiones de los consejos dados. Si no hago la dieta…. ¿subirá tan rápido como para que se «den cuenta» y «me echen la bronca»?. Posiblemente esta tendencia a medir para ver si se puede ocultar una transgresión para inducir a un engaño también sea culpa nuestra… ¿por qué este papel tan maternalista/paternalista que hace que algunos de los ciudadanos quieran engañarnos como hijos adolescentes?… ¿no les estaremos tratando como tales?.
De esta forma nos encontramos en un escenario donde:
- Todos queremos medir variables en salud.
- El hecho de medirlas nos va a dar la sensación de que las controlamos (que estamos por encima de ellas y que simplemente conociendo su valor estamos aportando algo positivo a nuestra salud).
- Tenemos herramientas tecnológica que nos van a permitir hacerlo.
Todo ello aderezado con un poco de publicidad….. y un posible gran éxito!!!.
Cada vez la salud va abriéndose un camino en las nuevas aplicaciones tecnológicas:
- Wearables en salud, a lso que ya hemos dedicado una semana muy interesante y entre los que existen verdaderos avances (junto con algunos proyectos cuyo aporte a la ciencia es mucho más tangencial).
- Aplicaciones (apps). Estos pequeños programas que podemos cargar en nuestros teléfonos inteligentes,tabletas y ordenadores. Hemos hablado mucho de apps sanitaris en este blog y simplemente recordar que el número de apps relacionadas con la salud va creciendo de manera progresiva.
- Sistemas operativos. Va a ser lo último…. y parece ser que tanto iOS (Apple) como Android van a incorporar en los mismos sistemas de medición de variables biológicas aprovechando elementos de medida que ya están integrados en su hardware y que se van a orientar a medir varibles en salud…. Veremos ern un futuro qué usos (beneficiosos y nocivos) les podemos dar los cuidadanos a estos nuevos servicios ofertados.