Aplicación del Internet de las Cosas (IoT) a los servicios sanitarios #IoT


mHealthLos cambios tecnológicos que se están produciendo en la actualidad (big data, movilidad, seguridad de la red, aplicaciones y programación en la nube) están transformando la sociedad de forma que se abren nuevas posibilidades para el desarrollo de negocios y actividades.

Muchos de ellos van dirigidos a la salud ya que numerosas variables corporales pueden ser medidas existiendo aparatos e instrumentos, que hasta ahora pertenecían de forma exclusiva al mundo sanitario, y que podemos llevar puestos en ropa y complementos.

El análisis de las tendencias gracia a la explotación de grandes volúmenes de datos (Big Data) nos permite hacer predicciones y análisis de tendencias en un futuro cercano mejorando las actividades sanitarias, la planificación de servicios en salud y ofreciendo datos más fiables a los investigadores.

Pero otro aspecto de esta revolución está apareciendo. Es el denominado internet de las cosas (Internet of the Things – IoT) que podemos definir como el conjunto de elementos inanimados conectados a la red y entre sí de manera que la respuesta de uno de ellos puede desencadenar una entrada en otro dispositivo. Es decir tendremos redes de elementos programadas que se pueden poner en funcionamiento de manera automática independientemente del control humano.

No se trata de una inteligencia de las cosas… por el momento los elementos no van a ser capaces de tomar decisiones, sino que ante resultados determinados de una variable concreta se van a desencadenar acciones en otros elementos de la red. Estas acciones están predeterminadas y responden a un objetivo concreto.

Por ejemplo. Ante un comportamiento errático de la marcha detectado por un GPS instalado en los zapatos de un paciente con demencia se puede desencadenar una reacción como enviar el geoposicionamiento al movil de un tutor, enviar una alarma a un cuidador o activar un sistema de búsqueda (o cualquier otra acción que consideremos… o todas a la vez).

Tenemos un gran campo de acción para empresas de cuidados, sobre todo para el control de pacientes crónicos en domicilio ya que a través de wearables disponemos de elementos de medida de numerosas variables… ahora nos queda ponerlo todos en comunicación y que ante determinados valores se desencadenen acciones concretas (escribir un correo electrónico al médico o enfermera, buscar una cita o activar un aviso domiciliario)

El Internet de las cosas tiene también un gran potencial como herramienta para la seguridad del paciente. Dispositivos conectados se instalan en casa del paciente, junto a la cama, o en las muñecas de los pacientes mas vulnerables con el objetivo de asegurar que sus cuidadores pueden estar continuamente informados. Toda esta información permite diagnosticar de manera precoz infecciones, adelantarse a potenciales reacciones adversas de los medicamentos o prevenir incompatibilidades medicamentosas en enfermos polimedicados, etc. permitiendo una atención de calidad en el domicilio del paciente.

Un ejemplo de la aplicación de los wearables a la salud es la aparición  relojes inteligentes que son capaces de condensar los resultados en salud de numerosos aparatos o terminales periféricos que miden variables en salud. Destacamos en este sentido el papel que está realizando la empresa Apple con su AppleWatch. Este reloj inteligente está encontrado un lugar en la industria de la salud gracias a los proyectos HealthKit y ResearchKit que están siendo potenciados por esta empresa con el desarrollo de numerosos ensayos clínicos en las principales universiudades estadounidenses buscando la validación de los valores de medida de los aparatos.

Esta forma de trabajo cambia totalmente la gestión asistencial de los pacientes y permite una retroalimentación continua mediante herramientas de comunicación multimedia ya sean sincrónicas o asincrónicas.